miércoles, 13 de abril de 2011

La dulce boca

     La dulce boca   
   La dulce boca que a gustar convida
un humor entre perlas destilado,
y a no invidiar aquel licor sagrado
que a Júpiter ministra el garzón de Ida,

  ¡amantes! no toquéis si queréis vida:               
porque entre un labio y otro colorado
Amor está de su veneno armado,
cual entre flor y flor sierpe escondida.

  No os engañen las rosas que al Aurora
diréis que aljofaradas y olorosas                     
se le cayeron del purpúreo seno.

  Manzanas son de Tántalo y no rosas,
que después huyen dél que incitan ahora
y sólo del Amor queda el veneno.

Comentario:

Este poema, se estructura en 2 partes:
1º parte, desde "La" hasta "seno"
2º parte, desde "manzanas" hasta "veneno"

Tema:
El autor hace referencia al mito de Tántalo, en el que se cuenta como, por castigo de los dioses, Tántalo, 
es destinado a vivir siempre sumergido en un lago, que le cubre hasta el cuello y ver siempre encima de él 
un árbol repleto de frutas, pero que por más que intenta llegar hasta él, más lejos está y más le cubre el agua. 
El autor compara esto con él mismo, que siempre que intenta "llegar" hasta su amada, no lo consigue, lo que nos 
da la idea, de que su amada está a otro nivel (amor cortés). El autor advierte a los amantes que el amor apasionado
 lleva a la perdición (trampantojo, trampa ante los ojos). 
También hace referencia a Adán y Eva (la serpiente que le ofrece la manzana.)



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